Post by M on Nov 30, 2009 21:01:05 GMT -5
Edward POV.
Estaba en casa organizando algunos libros antes de ir a recoger a Bella. Sin embargo, algo parecía no estar bien. Un terrible estruendo y un grito desgarrador sonaron en la mitad del bosque.
Sin pensarlo salte por la ventana con una terrible desesperación y por primera vez en mucho tiempo, con un dolor devastador en medio de mi pecho. Algo que llaman miedo.
Seguí corriendo hasta llegar a un punto donde el bosque se detenía abruptamente para dar paso a la luz del sol. Mi piel comenzó a brillar mientras en el medio de ese pequeño claro yacía un cuerpo sin vida. Me acerque lentamente, había un aroma demasiado conocido en el aire, el ardor de mi garganta fue tan fuerte que quemo mis entrañas en un segundo. Era Bella, mi Bella yacía sin vida en medio del claro en el cual habíamos declarado nuestro amor.
Me arrodille a su lado y cerré los ojos. Todo aprecia estar terriblemente mal. Mi cuerpo temblaba sin control mientras el frio de mi piel se trasladaba a lo que Bella llamaba alma. Saque de mi bolsillo algo que había desarrollado tiempo atrás, una mezcla de sulfuros lo suficientemente potente para quitarle la vida a cualquier ser sobre la tierra. Sin importar que tan grande y poderoso sea, una pequeña dosis de estos compuestos mezclados metódicamente, borrarían a cualquier ser de la faz de la tierra.
Bese los labios de Bella
-espérame mi amor-
Dije suavemente justo antes de llenar mi boca con el contenido negro del pequeño frasco
El sabor de la muerte era amargo, más amargo que mi propia ponzoña, más amargo que el sabor de la perdida de mi único amor. Pero no tan amargo como considerar la idea de vivir en un mundo donde ella no exista
Entonces, algo inesperado sucedió, sus latidos se reactivaron y sus pulmones se llenaron de vida una vez más. Sus hermosos ojos color chocolate volvieron a brillar bajo la luz del sol y su pálida piel volvía a sonrojarse con el flujo de sangre a través de ella. Giro la cabeza y me sonrió, y después salto a sobre mi encerrándome en un fuerte abrazo
-estoy viva!- dijo con una sonrisa aun abrazándome
Mi sorpresa fue mayor de lo que alguna vez pensé, y la rodee en un abrazo también
-wow...morí muy rápido-
-no estás muerto- dijo algo sorprendida por mis palabras
Yo reí un poco –wow, es fantástico, no hubo dolor..Es totalmente increíble-
-Edward…reacciona…soy yo- dijo ella y presiono sus tibios labios contra los míos, le devolví el beso acariciando su cuello
-te amo- dije suavemente y con una sonrisa mientras en mi interior el frio se propagaba por mis extremidades
Por primera vez en años, sentí los ojos cansados. Mire alrededor, y aun estábamos en el claro, mi piel aun brillaba bajo el sol y las flores aun reproducían bellos colores y aromas a nuestro alrededor, entonces, supe a ciencia cierta que aun vivía, pero no sería por mucho
-recuerdas a romeo y Julieta?-
Su rostro se torno en una sorpresa más marcada, el tipo de sorpresa que a nadie le gustaría recibir. Entonces, mi voz salió suave, pero sonora
-¡Ojos, mirad por última vez! ¡Brazos, dad vuestro último abrazo! Y vosotros, labios, puertas del aliento, ¡sellad con legitimo beso una concesión sin termino a la muerte rapaz- la mire un par de segundos, mientras mis brazos se cerraban más fuertemente alrededor de su cuerpo, que encajaba en el mío como una ficha de rompecabezas, y finalmente, mis labios se unieron a los suyos, besándola suave y lentamente
-lo siento…tome el veneno Bella- mi voz sonaba cada segundo más suave. Mis pernas fallaban y todo mi cuerpo se consumía en un dolor paralizante
Sus ojos comenzaron a humedecerse
-Edward...no… tu debes vivir- ahora, las lagrimas corrian libremente por sus tiernas mejillas ruborizadas
-y ahora…con un beso…muero-
Dije y caí al suelo en un fuerte estruendo. Ella tomo mi cabeza sobre sus piernas y comenzó a acariciar mi cabello. Mis ojos aun no se cerraban, y la luz no se escapaba de mí ser. Aun la miraba
-bebe mi sangre-
Dijo, pero ya era tarde. Con la ultima fuerza disponible en todo mi cuerpo, moví mi mano helada y rose su mejilla tibia, sonreí i un poco, y esa sonrisa quedo dibujada en mi rostro mientras mis ojos quedaban extasiados en lo más bello que vi en mi vida, el rostro de mi amada Isabella
Estaba en casa organizando algunos libros antes de ir a recoger a Bella. Sin embargo, algo parecía no estar bien. Un terrible estruendo y un grito desgarrador sonaron en la mitad del bosque.
Sin pensarlo salte por la ventana con una terrible desesperación y por primera vez en mucho tiempo, con un dolor devastador en medio de mi pecho. Algo que llaman miedo.
Seguí corriendo hasta llegar a un punto donde el bosque se detenía abruptamente para dar paso a la luz del sol. Mi piel comenzó a brillar mientras en el medio de ese pequeño claro yacía un cuerpo sin vida. Me acerque lentamente, había un aroma demasiado conocido en el aire, el ardor de mi garganta fue tan fuerte que quemo mis entrañas en un segundo. Era Bella, mi Bella yacía sin vida en medio del claro en el cual habíamos declarado nuestro amor.
Me arrodille a su lado y cerré los ojos. Todo aprecia estar terriblemente mal. Mi cuerpo temblaba sin control mientras el frio de mi piel se trasladaba a lo que Bella llamaba alma. Saque de mi bolsillo algo que había desarrollado tiempo atrás, una mezcla de sulfuros lo suficientemente potente para quitarle la vida a cualquier ser sobre la tierra. Sin importar que tan grande y poderoso sea, una pequeña dosis de estos compuestos mezclados metódicamente, borrarían a cualquier ser de la faz de la tierra.
Bese los labios de Bella
-espérame mi amor-
Dije suavemente justo antes de llenar mi boca con el contenido negro del pequeño frasco
El sabor de la muerte era amargo, más amargo que mi propia ponzoña, más amargo que el sabor de la perdida de mi único amor. Pero no tan amargo como considerar la idea de vivir en un mundo donde ella no exista
Entonces, algo inesperado sucedió, sus latidos se reactivaron y sus pulmones se llenaron de vida una vez más. Sus hermosos ojos color chocolate volvieron a brillar bajo la luz del sol y su pálida piel volvía a sonrojarse con el flujo de sangre a través de ella. Giro la cabeza y me sonrió, y después salto a sobre mi encerrándome en un fuerte abrazo
-estoy viva!- dijo con una sonrisa aun abrazándome
Mi sorpresa fue mayor de lo que alguna vez pensé, y la rodee en un abrazo también
-wow...morí muy rápido-
-no estás muerto- dijo algo sorprendida por mis palabras
Yo reí un poco –wow, es fantástico, no hubo dolor..Es totalmente increíble-
-Edward…reacciona…soy yo- dijo ella y presiono sus tibios labios contra los míos, le devolví el beso acariciando su cuello
-te amo- dije suavemente y con una sonrisa mientras en mi interior el frio se propagaba por mis extremidades
Por primera vez en años, sentí los ojos cansados. Mire alrededor, y aun estábamos en el claro, mi piel aun brillaba bajo el sol y las flores aun reproducían bellos colores y aromas a nuestro alrededor, entonces, supe a ciencia cierta que aun vivía, pero no sería por mucho
-recuerdas a romeo y Julieta?-
Su rostro se torno en una sorpresa más marcada, el tipo de sorpresa que a nadie le gustaría recibir. Entonces, mi voz salió suave, pero sonora
-¡Ojos, mirad por última vez! ¡Brazos, dad vuestro último abrazo! Y vosotros, labios, puertas del aliento, ¡sellad con legitimo beso una concesión sin termino a la muerte rapaz- la mire un par de segundos, mientras mis brazos se cerraban más fuertemente alrededor de su cuerpo, que encajaba en el mío como una ficha de rompecabezas, y finalmente, mis labios se unieron a los suyos, besándola suave y lentamente
-lo siento…tome el veneno Bella- mi voz sonaba cada segundo más suave. Mis pernas fallaban y todo mi cuerpo se consumía en un dolor paralizante
Sus ojos comenzaron a humedecerse
-Edward...no… tu debes vivir- ahora, las lagrimas corrian libremente por sus tiernas mejillas ruborizadas
-y ahora…con un beso…muero-
Dije y caí al suelo en un fuerte estruendo. Ella tomo mi cabeza sobre sus piernas y comenzó a acariciar mi cabello. Mis ojos aun no se cerraban, y la luz no se escapaba de mí ser. Aun la miraba
-bebe mi sangre-
Dijo, pero ya era tarde. Con la ultima fuerza disponible en todo mi cuerpo, moví mi mano helada y rose su mejilla tibia, sonreí i un poco, y esa sonrisa quedo dibujada en mi rostro mientras mis ojos quedaban extasiados en lo más bello que vi en mi vida, el rostro de mi amada Isabella